Salière

Salero dedicado a personas invidentes. Entre los problemas a resolver algunos eran que fuera un recipiente fácil de identificar, que permitiera conocer la cantidad aproximada de sal sin necesidad de verlo y que evitara derrames accidentales. Para ello, durante el proceso de diseño se buscó incluir en el producto un elemento que permitiera identificarlo sin verlo. Se decidió utilizar el conocido sistema de lecto-escritura braille, con lo que el producto tiene escrita la palabra “sal” en braille. Para evitar derrames accidentales se eligió un sistema de rosca para unir la tapa y el cuerpo del salero.
Mediante el uso del plástico como material se puede averiguar la cantidad aproximada de sal que contiene el recipiente, ya que si estuviera lleno pesaría más y si estuviera vacío pesaría menos. Aunque la cara plana donde se sitúa la inscripción braille sería transparente para que cualquier persona con un golpe de vista también lo pueda averiguar. Además, este material también permitiría que fuera más accesible económicamente.